Vivir en un espacio saludable es posible. Por eso en bioconstrucción nuestra visión es conseguirlo teniendo como guía a la naturaleza porque todo habitat saludable coge inspiracion de ella
En bioconstrucción entendemos el hogar como un organismo vivo donde varios principios ayudan a que se halle en equilibrio consigo mismo y con el entorno que le rodea.
Un ejemplo claro de esto sería la ropa con la cual nos podemos vestir que siendo de materiales naturales nos permite abrigarnos sin pérdida de calor, transpirar con facilidad y descargar a tierra de todo exceso de campos eléctricos artificiales.
Con esa misma filosofía un asesor de bioconstrucción utilizará métodos de construcción en sintonía con la naturaleza como la ventilación cruzada, paredes interiores de alta densidad y retención de la energía solar de manera pasiva minimizando el depender de soluciones mecánicas.
Los seres humanos vivimos en entornos con condiciones ambientales sujetas a fluctuaciones, el anhelo constante de un asesor de bioconstrucción es conseguir aquellas condiciones que fomenten la salud en el interior de las viviendas al mismo tiempo que se reduce la influencia de los campos electromagnéticos y se elimina el uso de materiales de construcción tóxicos.
Podemos materializar ese anhelo utilizando los siguientes principios:
1. Respetar el lugar de construcción
Buscar un lugar que se encuentre libre de perturbaciones geológicas que puedan alterar nuestro equilibrio.
2. Utilizar materiales naturales
La idea es seguir a la naturaleza y aprovechar les tradiciones que la respetan para conseguir entornos habitables y a la vez saludables.
3. Planificar el entorno, la energía y el agua
Investigar persistentemente cómo se pueden gestionar los recursos de la manera más ecológica y sostenible posible.
4. Limitar el ruido y las vibraciones
No sólo debemos evitar la contaminación por exceso de niveles sonoros sino también los ultrasonidos y movimientos imperceptibles.
5. Mantener un diseño interior en armonía
Tanto los materiales como las formas tienen que favorecer la armonía y el bienestar de los que viven dentro.
6. Favorecer la consolidación de un ambiente interior saludable.
Todos los elementos anteriormente comentados actuando sinergéticamente nos ayudan a tener salud física, psicológica y espiritual.